Las heridas en las urgencias equinas
Las heridas en los équidos son una causa frecuente de atención clínica. Los primeros auxilios del propietario, sugeridos por el veterinario, y los cuidados que en los primeros días el clínico dispense son cruciales para el desarrollo del caso. Los factores a evaluar son la antigüedad de la herida, su localización, la contaminación presente, el estado general del animal, y por último, las posibilidades económicas del propietario y destino o actividad del animal. En cualquier herida debemos lavar con solución isotónica a presión, desbridar las zonas contaminadas o desvitalizadas, suturar sólo en el momento apropiado, e instaurar tratamientos antiinflamatorios y antibióticos. De vital importancia es el mantener vendajes adecuados durante la cicatrización de la herida cuando ésta se produce en las extremidades. La meta fundamental en el tratamiento de emergencia de las heridas es estabilizar al animal, evaluar el alcance de la herida y preparar un plan de acción clínica. La disminución o ausencia de cicatriz y preservar la capacidad funcional de la zona afectada deben ser los objetivos de estos cuidados.
Publicado en la revista veterinaria Consulta de Difusión Veterinaria dirigida a veterinarios clínicos de perros, gatos y exóticos.
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