Efectos del manejo dietético sobre la conducta del gato
La nutrición, junto con los cuidados sanitarios y médicos, es un elemento fundamental de las atenciones que los propietarios dedican a sus mascotas. Por tanto, conocer las necesidades nutricionales básicas de un perro o de un gato resulta imprescindible para garantizar una alimentación equilibrada en cuanto a composición y pautas de administración de la dieta. En el gato, un manejo inadecuado de la alimentación puede favorecer la aparición de patologías como la obesidad, la cistitis idiopática felina o la anorexia, en cuya etiología participan, entre otros, factores relacionados con el estrés. En cualquier caso es recomendable tener en cuenta el patrón de la alimentación de la especie, que debería ajustarse en el entorno doméstico a las exigencias del ancestro del gato, dado que la composición de la dieta y la forma de consumo están relacionadas con la biología del animal y por tanto pueden influir sobre determinados mecanismos de control de la conducta. En este sentido, un manejo correcto del alimento puede representar una medida de prevención y una ayuda en el tratamiento de las citadas enfermedades que guardan alguna relación con la conducta.
Publicado en la revista veterinaria Consulta de Difusión Veterinaria dirigida a veterinarios clínicos de perros, gatos y exóticos.
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