Capnografía: “La monitorización en estado puro”

En los últimos años se han venido desarrollando métodos no invasivos que permiten monitorizar los valores de O2 y CO2 en sangre. La aparición de esas técnicas ha cambiado sustancialmente la práctica clínica tanto en cuidados intensivos como en anestesia. La posibilidad de monitorizar de forma continua el O2 y CO2, sin la necesidad de extracciones seriadas de sangre y su posterior análisis laboratorial, ha supuesto una gran mejora en la atención al paciente. Esas tecnologías se están haciendo cada vez más habituales en medicina veterinaria y aportan información muy valiosa para el clínico. La Oximetría mide de una manera continua el porcentaje de hemoglobina unida al O2 y la Capnografía mide, también de manera continua, la cantidad de CO2 en el aire respirado. La determinación del CO2 en el aire respirado es una parte muy importante en la evaluación de la eficiencia ventilatoria, tanto en pacientes sanos como críticos, y es el objeto de este artículo. La onda de capnografía puede sufrir cambios en cualquiera de sus fases. Existen varios patrones característicos que reflejan una amplia variedad de incidencias clínicas como son hiperventilación, hipoventilación, metabolismo aumentado o disminuido, reducción del intercambio gaseoso alveolar, disminución del gasto cardiaco, hipoperfusión pulmonar, tromboembolismo pulmonar, hipertermia, hipotermia, obstrucción de vías aéreas, función incorrecta del ventilador, pérdidas en el circuito respiratorio, extubación accidental, etc. El propósito de este artículo es establecer las bases para la comprensión de la onda de capnografía y el conocimiento del significado de los distintos patrones.

 

Publicado en la revista veterinaria Consulta de Difusión Veterinaria dirigida a veterinarios clínicos de perros, gatos y exóticos.

Identifíquese con sus datos de acceso

Podrá acceder a los contenidos completos de la revista.

Compartir: